Aficionado regio vivió una experiencia inolvidable, logró una foto con su ídolo, aquel que vio brillar en televisión y pudo estar en la conferencia magistral que ofreció en la ciudad.
Desde niño, Erick Yahir Sainz Espinoza es aficionado al futbol y su máximo ídolo, sin duda, es Roberto Carlos, quien brilló intensamente con la Selección de Brasil y con el Real Madrid.
Para el entrenador amateur de 27 años de edad y oriundo de Guadalupe Nuevo León, conocer al astro amazónico era casi imposible, pero su deseo era tal que consideró viajar a Madrid, lugar de residencia del sudamericano, para poder conocerlo.
Sin embargo, Lo que parecía imposible estaba a punto de lograrse, al ver un anuncio que decía ‘Roberto Carlos ofrecerá Conferencia Magistral en Monterrey’.
Los ojos de Erick se iluminaron y sin pensarlo dos veces acudió a comprar las entradas para el evento. ‘Es tanta mi admiración por él que le dije a mi novia que cuando nos casemos y tengamos familia, mi segundo hijo se va a llamar Roberto Carlos’, dijo Erick Yahir.
Foto: Luis Bahena/Distrito Regio.Sin embargo, surgieron imprevistos en el camino, la cancelación del evento en dos ocasiones, la segunda de ellas por ser uno de los invitados de honor a la final de la Champions League.
Finalmente se fijó la fecha del 2 de junio para que Roberto Carlos se presentaría en la ciudad y el ánimo de Erick cambió por completo, estaba contando las horas para conocer a su ídolo, sabía que tenía que ir a un hotel en San Pedro para recoger sus accesos al Meet and Greet, pero de pronto vio que el ex futbolista estaba dando una conferencia justo en el lugar al que él debía presentarse.
De inmediato subió a su coche y cruzó toda el área metropolitana para llegar al punto señalado con la intención de conocer a su ídolo.
‘¿Saben si aquí está Roberto Carlos?, vi que estaban pasando una rueda de prensa en este hotel y vine a ver si me puedo tomar una foto con él’, preguntó a la entrada del establecimiento.
De pronto el ex futbolista apareció rodeado de guardaespaldas y salió momentáneamente, Erick quedó pasmado sin oportunidad de sacar su teléfono para capturar el momento.
‘Nombre que emoción, no me dio tiempo de sacar mi teléfono, pero no importa, esto lo voy a recordar siempre’, dijo el vecino de ciudad Guadalupe dejando escapar unas lágrimas por la emoción.
Pero a medida que platicaba su experiencia, el brasileño y su séquito de escoltas regresaban al hotel y en esta ocasión se detuvo a tomar fotografías y firmar autógrafos.
‘Me tomas una foto por favor, también le voy a pedir que me firme mi playera’, dijo con la emoción de un chico que obtiene su regalo preferido.
Erick Yahir no podía contener las lágrimas, se alejó para abordar su vehículo y prepararse para la noche, para la Conferencia Magistral y una convivencia, pero él ya había conseguido hacer realidad su sueño unas horas antes.
Foto: Luis Bahena/Distrito Regio.
