Fue el 18 de Marzo del 2008 cuando la ciudad se sorprendió por unas condiciones de clima inesperadas.
La mañana del 18 de marzo del 2008, los regiomontanos se sorprendieron cuando una fuerte racha de vientos azotó contra el área metropolitana días antes de llegar la primavera.
Cerca de las 10:00 horas comenzó una tormenta que causó estragos tanto en la energía eléctrica como en las líneas telefónicas, volviéndolo todo un caos.
El inexplicable fenómeno presentó vientos mayores a los 120 km por hora que causaron daños en las calles; los semáforos dejaron de funcionar, cayeron más de 900 árboles y 500 anuncios panorámicos, así como postes y torres de alta tensión.
Eran fechas de vacaciones de Semana Santa, por lo cual no había tanta afluencia de ciudadanos en las calles, aún así, dos personas perdieron la vida y 14 resultaron heridas.
Además de más de 120 vehículos resultaron con daños y la línea 1 del metro dejó de funcionar.
Los daños causados dejaron se calcularon en cerca de 100 millones de pesos.
Fue hasta alrededor de las 20:00 horas de la noche, que el clima se tranquilizó y Monterrey volvió a su tranquilidad.