Existen muchas historias respecto a la Cuaresma, como el consumo de mariscos y pescados, aquí te explicamos por qué.
La cuaresma es uno de los períodos litúrgicos en el que, de acuerdo a la religión católica-cristiana, los creyentes se preparan para celebrar la fiesta de Pascua, la cual, da inicio el Miércoles de Ceniza y culmina el Domingo de Ramos.
La palabra Cuaresma proviene del latín ‘quadragésima’, lo cual significa 40 días antes de la Pascua, un período religioso que suele tener como característica el ayuno y la abstinencia de la carne.
La carne roja suele no consumirse durante este período, porque de acuerdo a las creencias religiosas, representa el cuerpo de Cristo crucificado, por ello, se acostumbra la preparación de platillos a base de pescados, mariscos y algunas aves como pollo o pavo.
También se dice que el ayuno cristiano radica en la abstinencia de ingesta de carnes de todo animal sacrificado y en el que hubiera un derramamiento de sangre.
Y como los peces y mariscos no son sacrificados, pues mueren por asfixia y no son desangrados, su consumo fue ampliamente incorporado en la dieta cuaresmal.
Ahora bien, ¿por qué el pescado o los mariscos, ‘estarían libres del pecado’ durante esta temporada?
Resulta que la carne de pescado cuenta con diversas menciones en las Sagradas Escrituras, donde generalmente son representadas la alimentación y la vida.
Aunado a ello, es importante destacar que una de las profesiones más mencionadas en la Biblia, es la de los pescadores, siendo esto una manera de trabajo honrada.
Recuerdar también que los Apóstoles eran llamados ‘pescadores de almas’ y que el pescado es considerado como el pan y el vino, símbolo de la eucaristía.
