Fue en la capital del Donobass que una gran cantidad de personas esperaban salir hacia zonas seguras, esto ante una amenaza de ataque por parte de los rusos.
Un saldo de 39 personas fallecidas y al menos 100 heridos fue lo que dejó el ataque de un misil en la estación de tren de la ciudad de Kramatorsk, al este de Ucrania, en donde cientos de personas se encontraban haciendo fila para salir de la región que ya contaba con una advertencia de ataque.
Según medios internacionales, a las afueras de la estación se encontraban decenas de autos carbonizados, maletas y cuerpos tendidos cubiertos con mantas, sumado a los restos de misil regados por toda la zona.
El presidente ucraniano Volodímir Zelensky, condenó el ataque de las tropas rusas y lanzó un mensaje al gobierno opositor por medio de Telegram, después de haber dado a conocer la noticia a nivel nacional.
‘Como no tienen fuerza ni valor para enfrentarse a nosotros en el campo de batalla, destruyen cínicamente a la población civil. Es una maldad sin límites. Y si no se castiga, no cesará jamás’, declaró.
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso señaló que las tropas a cargo de Vladimir Putin no fueron las responsables del ataque, y que desconocían el origen de los misiles proyectados en la estación, rumorando incluso que eran consecuencias de la resistencia impuesta hacia Rusia.
‘Todas las declaraciones de los representantes del régimen nacionalista de Kiev acerca del supuesto ‘ataque con cohete’ llevado a cabo por Rusia el 8 de abril en la estación de tren de la ciudad de Kramatorsk son una provocación y son absolutamente falsas’, dijo el ministerio en un comunicado difundido por RIA Novosti.
Al menos 39 muertos y decenas de heridos.
Un ataque contra la estación de tren de #Kramatorsk, de donde cientos de personas huían ante la ofensiva rusa en el Donbás.
Había sobre todo mujeres y niños, que esperaban a ser evacuados. #Ucrania pic.twitter.com/8iz07A0cxb— Almudena Ariza (@almuariza) April 8, 2022
Kramatorsk es la capital del Donobass que aún está bajo control ucraniano, y horas antes del ataque centenares de personas aguardaban en fila, para salir de la región en dirección a otras partes más seguras del país.
Desde poco más de una semana, la población de regiones aledañas a Kiev han comenzado a evacuar derivado de una amenaza por parte de la milicia rusa para tomar el Donobass, y a su paso han dejado una numerosa serie de civiles muertos, como ocurrió en Bucha.
El pasado 7 de abril, Rusia fue expulsado del Consejo de Derechos Humanos de la ONU por los crímenes de guerra cometidos en Ucrania como atacar hospitales y corredores humanitarios, mientras que la OTAN continúa enviando armamento a la defensa ucraniana.